Esta historia es narrada por el protagonista, un actor que se llama a sí mismo "El gran Lorenzo" y que ha sido contratado para suplantar al reconocido político Bonforte, dicho sea que Lorenzo esta muy lejos de su ideología, ya que Bonforte es un político "expansionista" que busca integrar al imperio a los marcianos, por quienes Lorenzo siente repulsión que solo mediante hipnosis puede mitigar a fin de cumplir su papel.
Pues Lorenzo narra su perspectiva en el reto de apropiarse de la personalidad de Bonforte, muy a menudo se jacta de su profesionalismo, su entrenamiento, su preparación, al grado que si empieza a parecer una lectura aburrida.
Inicialmente Lorenzo solo tenía que hacer una representación en un evento con los marcianos pero las cosas se complicaron, y luego tuvo que hacer otra, y ahora con el mayor político, el emperador, ahí empieza a tornarse interesante, Lorenzo y yo comenzamos a comprender porque hay tantos roles que hacen complejo el acto de gobernar:
"Yo descargo a mis ministros de muchos de esos aburridos trabajos de colocar primeras piedras y asistir a los desfiles, ya sabe."
Algo que me pareció super interesante es que es una ciencia ficción que carece computadoras y robots, es un escenario para seres vivos orgánicos: marcianos y humanos, principalmente estos últimos.
El final se vuelve obvio, y que hacer cuando el desenlace es obvio? hacer un fabuloso cierre.
Premio Hugo a Mejor novela 1956. Yo también voto por ello.
