Publicado en 1983, este es el tercer libro de la serie Robots, sin olvidar que Asimov ya en 1950 había publicado Yo, Robot, que de hecho se menciona en esta entrega.
Elijah Baley el detective terrícola es nuevamente el protagonista llamado a resolver un Roboticidio un caso extremadamente dificil que involucra a uno de los protectores de la expansión de los terrícolas hacia la colonización de la galaxia, de ahí, que el gobierno de la Tierra esta muy interesado en que se solucione el conflicto. Elijah se ve acompañado de R. Daneel Olivaw, el robot humanoide, pero con menos protagonismo y mas como referencia de una amistad entre humano y robot.
El Dr. Han Fastolfe a quien ya conocíamos brevemente de los dos anteriores libros, ahora es sospechoso de "asesinar" al robot humanoide Jander Panell, este hecho se ha interpretado en el planeta Aurora como un boicot a la misión de colonización de la galaxia empleando robots humanoides.
Elijah solo tiene un sospechoso capaz de anular a un modelo de Robot único, y en la escena del crimen no hay nadie, no hay huellas ni pistas, a excepción de que solo hay otros robots, quienes no podrían haber violado las leyes de la robótica, solo le queda tirar realmente fuerte del hilo para ir descubriendo quienes se relacionan con la victima aun cuando nunca hayan estado en contacto.
Y pues no me ha parecido mas que Genial! Para mi es el mejor de la serie Robots de Asimov, lo he disfrutado muchísimo, he reído con el protagonista, me encantan la chispa y la humanización descabellada que hizo Asimov así como los escenarios que planteó como normas sociales.
Las líneas de pensamiento del detective me parecen mas claras, pregunta lo obvio, no hace suposiciones, plantea los escenarios dispares y poco probables, y sobre todo, juega con la psicología humana.
"...La Tierra es el auténtico mundo del Amanecer..."